NO hay mejor manera para empezar este largo y profundo estudio sistemático de las diferentes doctrinas de nuestra fe que dando a gracias a Dios porque todo cuanto nosotros conocemos acerca de ÉL es porque ÉL se ha revelado y ha decidido darse a conocer.
Pero, ¿qué significa realmente «revelar»? Significa quitar el velo, retirar la cubierta para que se pueda ver algo que antes estaba oculto, y eso es lo que Dios ha hecho de Sí Mismo. ÉL ha comunicado a nosotros, a los seres humanos la verdad respecto a Sí Mismo, esto es, Su Naturaleza, Su Deidad, Su Gloria, Sus Obras, Su Propósito y Su Plan. ÉL ha tomado la iniciativa de ello.
Sería triste, agónico e incluso un suicidio intelectual confiar y descansar en algo o alguien basándonos en unas meras especulaciones, en filosofías racionales o en meros sistemas cambiantes de pensamiento secular (aún llenos de ciencia). Sin embargo, nuestra fe, nuestra creencia, nuestra religión, nuestra doctrina se basan y se sostienen en que Dios mismo, y no nosotros, ha decidido dar el primer paso para darse a conocer y revelarse.
DIOS SE HA REVELADO, Y LO HA HECHO DE VARIAS MANERAS
Dios por su eterno carácter es Incomprensible e Insondable (Det. 29:29, Isaías 40:18, Job 11:7, Romanos 11:33), pero es conocible (cognoscibilidad de Dios), pues se ha dado a conocer hasta el grado de su revelación, y en términos accesibles, comprendibles y entendibles para nosotros, de hecho se hizo hombre como nosotros.
Jeremías 9:23-24 «Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas. Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová.»
Es por ello que la Biblia misma en su primer versículo de su primer capítulo de su primer libro ya deja más que claro la existencia de Dios (Génesis 1:1)
Ante esta tesitura o dilema, el hombre creado a imagen de Dios, pero caído, tiene 2 opciones:
- POR NOSOTROS MISMOS: Es decir, tratando de buscar, hallar o encontrar a Dios a través de uno mismo, de sus esfuerzos, sensaciones, instintos, razonamientos individuales y particulares, sabiduría y razonamientos humanos, conocimiento intelectual,… Este es el nefasto y errado camino de las sectas. Es menester destacar que si Dios es Infinito, el hombre no lo es, es más, él es caído y depravado, y su mente es demasiado pequeña y limitada como para abarcar y comprender a Dios. Una mente finita NO podrá entender a una infinita, pero una finita, a la vez que reprobada y caída no va a llegar ni a creer en el conocimiento de Dios, no va a buscar, no va a desear ni querer. Anda ciego a las verdades espirituales, pero muy despiertos a crearse falsos dioses (ídolos) conforme su imagen y semejanza.
Job 11:7 «¿Descubrirás tú los secretos de Dios? ¿Llegarás tú a la perfección del Todopoderoso?
- POR ÉL: En Su Gracia, Él ha decidido revelarse, y esa es nuestra mayor esperanza. Ahora los hombres y mujeres pueden saber de EL y conocerlo, quedando todos sin excusa y siendo enteramente responsables.
NO podemos ver a Dios físicamente con nuestros ojos, no obstante sí que podemos conocerlo por medio de la revelación, la cual puede ser de 2 tipos o clases diferentes:
1.- REVELACIÓN GENERAL
Dios se ha revelado a Sí Mismo a través de la creación y de la naturaleza, dejándonos sin excusa a todos. ÉL ha dejado y desplegado, y lo hace todos los días desde el comienzo de la historia de la humanidad, sus marcas y sus huellas a todo el mundo a través de la obra de la creación, de la naturaleza. Su carácter invisible se revela por medio de las cosas que son vistas, por medio de la perfección, la cohesión y el orden de toda la creación.
Hechos 14:15-17 NVI «Señores, ¿por qué hacen esto? Nosotros también somos hombres mortales como ustedes. Las buenas nuevas que les anunciamos son que dejen estas cosas sin valor y se vuelvan al Dios viviente, que hizo el cielo, la tierra, el mar y todo lo que hay en ellos. En épocas pasadas ÉL permitió que todas las naciones siguieran su propio camino. Sin embargo, NO ha dejado de dar testimonio de sí mismo haciendo el bien, dándoles lluvias del cielo y estaciones fructíferas, proporcionándoles comida y alegría de corazón.«
Romanos 1:19-20 «porque lo que de Dios se conoce les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó. Porque las cosas invisibles de ÉL, Su eterno Poder y Deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que NO tienen excusa.»
Salmo 19:1 «Los cielos cuentan la Gloria de Dios, y el firmamento anuncia la Obra de Sus Manos.»
¿POR QUÉ ES UNA REVELACIÓN GENERAL? Básicamente por 2 razones:
- Porque SU CONTENIDO Y MENSAJE es general, es decir, nos revela Su poder, Su Majestuosidad, Su Deidad, Su Solemnidad y Su Grandiosidad. NO es un contenido particular, minucioso o específico, NO nos declara o expresa nada de la obra de redención ni de la cruz, pero este conocimiento ya es suficiente como para poner a toda la humanidad «sin excusa alguna» ante ÉL.
- Porque SU PÚBLICO O AUDIENCIA es general: A pesar de que NO todas las personas son cristinas, o han leído una Biblia jamás, sí es cierto que todos los días, toda la humanidad es testigo de la Gloria del Dios creador. Dios NO se ha revelado a un selecto grupo específico, sino que el mundo entero es su escenario, su «obra de teatro», y ÉL es el director, guionista y el actor principal
¿Y EL ATEÍSMO O EL AGNOSTICISMO?
NO es más que otra prueba o evidencia de la depravidad humana como consecuencia de la caída, ya que NO es tanto un problema de conocimiento o revelación, sino más bien de someternos a ÉL (ver Romanos 1:21-23). Si bien el agnóstico se muestra más neutral y no niega ni cree poder afirmar Su existencia, el ateísmo niega tajantemente toda evidencia y rechaza la existencia de Dios. Y debido a la más que continua evidencia que Dios deja de Sí mismo día tras día, la Biblia humilla al ateo o al agnóstico llamándoles directamente «necio» (Salmo 14:1).
Si disfrutas de un paseo de senderismo por un precioso valle, o si fotografías una puesta de sol, o si estás estudiando anatomía en biología, y para ello debes diseccionar el complejo organismo de un anfibio, te darás cuenta de lo que estamos tratando de explicar.
SI EL TEMOR A DIOS ES EL PRINCIPIO DE LA SABIDURÍA, EL NEGAR LA EXISTENCIA DE ÉL ES EL COLMO DE LA NECEDAD Y DE LA INSENSATEZ
Esta doctrina de la indudable revelación general de Dios es sumamente importante, y es por ello que el Apóstol Pablo cuando trataba de persuadir en la fe a los gentiles, quienes no tenían un correcto entendimiento del Dios de la Biblia, siempre comenzaba por este punto, como cuando predicó a los atenienses:
Hechos 17:24-28 «El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en ÉL hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, NO habita en templos hechos por manos humanas, ni es honrado por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues ÉL es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas. Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los límites de su habitación; para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros. Porque en ÉL vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque linaje suyo somos.»
¿Y LA CEGUERA FÍSICA, ES UN IMPEDIMENTO O BARRERA PARA CONOCER A DIOS?
En absoluto, pues además de la revelación a través de la creación, las estrellas, la luna, el sol y la naturaleza, Dios ha plantado un conocimiento en el alma humana, una CONCIENCIA que, a pesar de todo, todos tienen un sentido y una noción general de lo correcto y lo incorrecto, un código moral (mermado y afectado por el pecado) y es por eso que aún las más escondidas tribus indígenas saben que asesinar, robar o mantener relaciones sexuales con la mujer de otro está mal. Se trata de la obra de la ley.
Además, esto explica la naturaleza religiosa de la humanidad, pudiendo apreciar que en todas las culturas de los todos los tiempos y en todos los lugares, siempre han creído y venerado la existencia de una realidad divina más elevada y alta que ellos.
¿ESTO ES TODO?
NO, además de la vasta autorevelación de Dios a través de la naturaleza (revelación natural) y de la conciencia humana, existe igualmente la revelación de Dios a través de LA HISTORIA, del curso y la providencia de ella. Y aunque sea menos impresionante, a priori, que la revelación en la naturaleza, ya que debe de haber consultas históricas, análisis y estudios por parte de la persona, tan solo el mero ejemplo de la pequeña nación de Israel ya es un gran ejemplo de ello. La historia del mundo es una clara revelación de Dios
Salmo 47:7-8 «Porque Dios es el Rey de toda la tierra; cantad con inteligencia. Reinó Dios sobre las naciones; se sentó Dios sobre su santo trono.»
Daniel 2:21 «Y Daniel habló y dijo: Sea bendito el nombre de Dios de siglos en siglos, porque suyos son el poder y la sabiduría. El muda los tiempos y las edades; quita reyes, y pone reyes; da la sabiduría a los sabios, y la ciencia a los entendidos.»
Esta revelación general (naturaleza, conciencia humana e historia) que ÉL ha hecho de Sí mismo a todos debiera de provocar una unánime respuesta de alabanza y adoración, y el hecho de NO ser así es precisamente el motivo por el cual Pablo le recrimina a la raza humana, caída, depravada y pecadora, que es culpable ante ÉL por NO servirle, obedecerle ni adorarle como solo ÉL merece y demanda (Romanos 1:18-ss.)
ÉL nos ha dado una tremenda revelación objetiva, racional y válida de Sí Mismo por medio de la creación, la naturaleza, el transcurso de la misma historia y aún en nuestra personalidad humana. Es indiferente si lo observas o no, si lo entiendes o no, si lo crees o no, ÉL se ha revelado a todos. Es más, es indiferente si estamos mermados, afectados o directamente incapacitados, por los catastróficos efectos del pecado, ÉL se ha revelado claramente todos los días a toda la entera humanidad, y ésto debería llevarnos a la primera y necesaria conclusión de que existe verdaderamente un Dios glorioso, Eterno y Poderoso. La segunda conclusión es que, debido a nuestra conciencia interior, a nuestra ley moral interna (Romanos 2), deberíamos darnos cuenta de que NO estamos viviendo para Su Gloria, y que somos culpables ante ÉL.
LA REVELACIÓN GENERAL EXHIBE SU GLORIA, Y CONDENA JUSTAMENTE A TODO AQUEL QUE LA RECHAZA
Al igual que la Ley para los judíos, la revelación general sirve, no para hacernos justos ante Dios, sino para hacernos y señalarnos culpables.
Para que nos hagamos una ligera idea de la magnitud de nuestro Dios que sobrepasa todo, pero que ha decidido por pura gracia revelarse a nosotros, y lo ha hecho primeramente a través de la creación.
Nosotros estamos en una galaxia llamada la Vía Láctea, donde hay muchas estrellas, y 1 de ella se llama Eta Carinae.
Esta estrella (Eta Carinae) es de 30 a 60 veces más grande que el Sol, y en ella cabrían de 50 a 80 millones de planetas Tierra.
Solamente te he hablado de una estrella, nuestra Galaxia tiene de 200.000 a 400.000 millones de estrellas (y dice el Salmo 147 que ÉL conoce el número y el nombre de cada una)
Solamente te he hablado de una galaxia solamente, la Vía Láctea; pero es que (según los científicos) hay en torno a 2 billones a 2 trillones de galaxias.
Todo lo creó, y Todo lo sustenta con SU Palabra. Ese es un breve y efímero reflejo de la inmensidad de nuestro Dios
¿ES ESTA CLASE DE REVELACIÓN SUFICIENTE?
Aunque es suficiente para saber que hay un Creador y que se ha revelado, es insuficiente o incompleto en cuanto a todo lo que ÉL ha revelado, esto es, Su Propósito, Su Obra de Redención en Cristo para salvarnos,… NO revela un camino de salvación en el que los pecadores puedan reconciliarse con Dios, pero Dios NO se quedó ahí, y Su Auto-revelación fue a más.
Por causa de los estragos el pecado, los hombres niegan la evidente revelación de Dios, la rechazan, huyen de ella.
¿Entonces qué? ¿Hay alguna esperanza para nosotros? La respuesta se halla en la otra clase o tipo de Revelación de Dios.
2.- REVELACIÓN ESPECIAL
Esta revelación nos muestra su perfecto y eterno plan redentor, desplegado a lo largo de la historia y plasmado en la Biblia, a través de las profecías mesiánicas, la Encarnación, la pasión, Muerte y Resurrección. Se llama «Especial» porque está dirigida de una manera especial a Su Pueblo (y NO a todas las personas en todo momento y lugar), y también porque se centra de una manera más enfática en la gracia, la salvación y la redención.
Antes de la caída (Génesis 3) NO hacía falta que Dios revelase Su Misericordia, pero tras éste, Dios comienza a revelar y a desplegar Su Plan de Redención.
La Revelación especial de Dios incluye: la apariencias y manifestaciones física de Dios (teofanías. Ver Génesis 3:8; 18:1; Éxodo 3:1-4; 33, 34:5-7), sueños (Génesis 28:12; 37:5; 1 Reyes 3:5; Daniel 2), milagros, señales, Su Palabra directa y audible (Adán en Edén, y con Moisés en Sinaí), visiones (Génesis 15:1; Ezequiel 8:3-4; Daniel, el capítulo 7; 2 Corintios 12:1-7), la Palabra escrita de Dios y lo que es más importante, el pináculo de Su Revelación, Jesucristo, la Palabra hecha carne.
Hebreos 1:1-4 «Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo; el cual, siendo el resplandor de Su Gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de Su Poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas, hecho tanto superior a los ángeles, cuanto heredó más excelente nombre que ellos.»
SU PALABRA, la Biblia, es una extraordinaria forma de revelación de Dios, en la cual, de una forma soberana y milagrosa, Dios seleccionó, guió e inspiró a hombres para que escribieran la Santa, Inerrante, Autoritaria e Infalible Palabra de Dios. Ella es viva y eficaz (Hebreos 4:14), es inspirada, útil, capaz y suficiente para instruir, exhortar redargüir y capacitar a toda buena obra (2ª Timoteo 3:16-17). Es el gran mensaje de Dios para nosotros, y allí lo incluye todo: la creación, la caída, la Trinidad, todo acerca de nosotros y del pecado, de los ángeles o de Satanás, acerca de los juicios venideros y de Israel, pero sobre todo nos presenta a JESUCRISTO como el tema, el hilo conductor, el objeto y el cumplimiento de las profecías, el clímax de todo y en todos.
La forma suprema de revelación de Dios fue en y a través de la persona de CRISTO. En ÉL se nos revela de una forma sin igual Su Poder y Sabiduría, a la vez que Amor, Bondad, santidad y Gracia, y por eso ÉL pudo decir (y decirnos) «quien me ha visto a MI, ha visto al Padre» (Juan 1:1 y 14:9). ÉL es el resplandor de la gloria de Dios, la fiel imagen de lo que ÉL es, la plenitud de Su naturaleza, esencia, gloria y atributos sin disminución alguna. En el Verbo, en Cristo, Dios nos ha dado a conocer Su Mente y Su Corazób
Gálatas 4:4-5 «Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley, para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos.
Dios se encarnó y asumió una humana naturaleza (pero sin pecado) para identificarse plenamente con nosotros, para darnos un ejemplo en todo, para enseñarnos, para revelarse a nosotros de una manera más que comprensible, y lo más importante, para proveernos la salvación humillándose a sí mismo en la muerte en la cruz (Filipenses 2:6-8).
En definitiva, en Cristo hallamos la Plenitud de la Revelación del Padre, y es sólo por medio de las inspiradas Escrituras que podemos conocer a Cristo.