Iniciamos el estudio expositivo de Efesios propiamente dicho, de esta preciosa cartay profunda carta en sí.
Efesios 1:1-2 «Pablo (Autor de esta carta), Apóstol de Jesucristo (Él escribe desde una autoridad única y apostólica) por la voluntad de Dios (Pablo era Apóstol, porque así Dios mismo lo quería y lo estableció, y éste era el fundamento de su llamado), a (Receptores y destinatarios de esta carta) los santos (separados y apartados por Dios y para Dios para ser SU Pueblo consagrado) y fieles (derivado de la palabra fe) EN Cristo Jesús (tremendamente importante este concepto paulino que nos recalca la esfera, ámbito, realidad y posición del creyente) que están en Éfeso (estas 2 últimas palabras NO aparecen en los manuscritos más antiguos, con lo que gana la idea que se trate de una carta circular para las iglesias de la región del Asia Menor, siendo Éfeso la más importante e influyente): Gracia y paz a vosotros (estas palabras describen la salvación inicial de Dios que nos viene por medio de la Cruz; solo ÉL imparte Gracia y Paz. Usado en todas las cartas de Pablo) de Dios nuestro Padre Y (alude identidad entre Dios Padre y Cristo, pues este es Dios junto con El Padre y el E.S.) del Señor Jesucristo (En el A.T. se utilizaba «Señor» para aludir al Dios de Israel, con lo cual, apropiar este título único a Jesús es sumamente importante y fundamental en cuanto a la relación y asociación El Padre, pues es igual Dios que ÉL y que el Espíritu Santo).»
Comenzamos el estudio expositivo de Efesios propiamente dicho, con el típico saludo apostólico de Pablo; muy similar en sus cartas (2ª Corintios 1.1, Colosenses 1:1, 2ª Timoteo 1:1,…); siendo ésta la introducción más breve de las cartas de Pablo.
Cuando habla de APÓSTOL NO se refiere a su significado etimológico, es decir, «Enviado de Dios», en un sentido misionero, sino que se refiere al sentido específico de los 12 más Pablo, comisionados directamente por El Señor para poner y establecer el Fundamento, para todos aquellos que creerían en ÉL (Juan 17:20).
En ese sentido original NO pueden haber más Apóstoles, pues ya NO puede haber más fundamento y más revelación, que la dada una vez a los santos.
Efesios 2:20 «edificados sobre el fundamento de los Apóstoles y Profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo»
Judas 3 «(…) fe que ha sido una vez dada a los Santos.»
Para él, el único privilegio que estimaba de valor era el ser un Apóstol de Cristo, considerando todos los demás títulos como pérdida por causa de Cristo.
Pero ser un Apóstol de ÉL era un altísimo honor, y por eso lo defendía con su fuerza y vigor en sus dos cartas a los Corintios (1ª Corintios 4 y 9 y 2ª Corintios 10)
EL CRISTO RESUCITADO LO LLAMÓ PARA EL OFICIO DE APÓSTOL; EL MÁS ALTO CARGO O MINISTERIO DE LA IGLESIA.
Reunía los REQUISITOS para ser un Apóstol de Jesucristo:
Recordar que la palabra Apóstol, en un sentido general significa “Enviado con una comisión”, pero en el sentido bíblico aquí expuesto, y aquí descrito debe reunir estos requisitos, los cuales hoy es imposible que alguien pueda cumplirlos:
- Ser comisionado directamente de labios del Señor Jesús (Matías fue designado por hombres, y lo fue antes de Pentecostés) (ver: Marcos 3:14, Lucas 6:13, Hechos 1:2, Hechos 1:24, Hechos 10:41, Gálatas 1:1)
- Haber visto Al Señor después de Su Resurrección, es decir, ser testigo ocular (Hechos 1:22, 10:39-41, 1ª Corintios 9:1 y 15:7-8)
- Ejercitaban una inspiración especial, explicando y escribiendo de forma inerrante (plenamente inspirados por Dios Espíritu Santo) la escritura; en el caso de Pablo escribe 13 libros del N.T. además de recibir la revelación profunda de la Iglesia de Cristo, como se ve en Efesios.
- Ejercitaban autoridad suprema (Ver 2º Corintios 10:8, Filemón 8)
- Hacían milagros (Hechos 2:42-43, 2ª Corintios 12:12, Mateo 10:1-2, Hechos 1:5-8, Hechos 4:33, Hechos 5:12, Hechos 8:14,, Hebreos 2:3-4 )
Pablo NO conoció al Jesús de los 3 años del Ministerio Público, sino más bien al Cristo Glorificado, y lo hizo de camino a Damasco (ver Hechos 9), por eso siempre enfatizó el nombre de Cristo primero (Cristo Jesús).
Su autoridad radica precisamente en que él es Apóstol de Jesucristo.
Esta Autoridad Apostólica le capacitó para revelar el propósito eterno de Dios con respecto de la Iglesia; la cual es edificada sobre esta revelación, el fundamento de los apóstoles y profetas (Efesios 2:20)
VOLUNTAD DE DIOS
Gálatas 1:15-16 «Pero cuando agradó a Dios, que me apartó desde el vientre de mi madre, y me llamó por su gracia,revelar a su Hijo en mí, para que yo le predicase entre los gentiles, no consulté en seguida con carne y sangre.»
Cristo fue revelado a él, y en él para ser el Apóstol de Cristo, el Apóstol de los gentiles (los NO judíos); Dios así lo dispuso, NO pablo por su mera voluntad propia.
Ver el encuentro de Pablo con Cristo https://detalmanera.com/el-encuentro-que-cambio-el-mundo-saulo/
SANTOS Y FIELES
Son sinónimos, y se refiere a los verdaderos creyentes EN Cristo (en cuanto a su posición espiritual), siendo igualmente los Destinatarios de esta carta, los cuales han sido separados del pecado y apartados para con Dios, ya que han puesto su fe en ÉL como su Salvador y Señor personal, demostrándolo con sus vidas.
Son los santificados por Dios de lo profano.
Ser santo es una posición, mejor dicho, un estado del hombre y NO un título religioso; y este alude o significa estar separado o apartado para un exclusivo uso de Dios.
Son (y somos nosotros también ahora EN Cristo) propiedad privada y exclusiva de Dios.
Levítico 11:44-45 «Porque yo soy Jehová vuestro Dios; vosotros por tanto os santificaréis, y seréis santos, porque yo soy santo; así que NO contaminéis vuestras personas con ningún animal que se arrastre sobre la tierra.Porque yo soy Jehová, que os hago subir de la tierra de Egipto para ser vuestro Dios: seréis, pues, santos, porque yo soy santo.«
Fiel es aquel que pone su confianza en Dios.
Muy importante es recalcar y enfatizar el «Aspecto Geográfico» de Pablo, a través de la preposición «EN»
Aunque geográfica y físicamente estaban en Éfeso, a la vez estaban espiritualmente EN Cristo; y Pablo en sus cartas siempre les recordaba a sus lectores, a sus destinatarios esta gran posición de dignidad lograda por Cristo en la Cruz a nuestro favor y para SU Gloria.
EN CRISTO
Es lo más maravilloso de todo, y el gran logro de la Salvación, es decir, estar orgánicamente unido a ÉL; de la misma manera que un ave está en el aire, y a la vez el aire está en el ave, o el pez en el agua, y el agua en el pez; así está Cristo en el creyente y viceversa, pues la Cabeza está en el Cuerpo, y el cuerpo en la cabeza.
Pablo NO dice que los santos y fieles creían en Cristo, sino que estaban EN Cristo en un sentido posicional.
Y esta preposición «EN» (En Cristo, En el señor, En Jesús, En ÉL, En el Amado,…) es de lo más importante de toda la Teología de Pablo, pues de las 164 veces que lo expresa en sus cartas aludiendo al contexto de salvación, y de beneficios derivados de ella, 36 veces se encuentran en esta profunda carta.
Juan 15:4-7 «Permaneced EN MÍ, y YO EN vosotros. Como el pámpano NO puede llevar fruto por sí mismo, si NO permanece en la vid, así tampoco vosotros, si NO permanecéis en MÍ. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece EN MÍ, y YO EN él, éste lleva mucho fruto; porque separados de MÍ nada podéis hacer. El que en mí NO permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden. Si permanecéis EN MÍ, y mis palabras permanecen EN vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.»
1º Corintios 6:17 «Pero el que se UNE al Señor, un espíritu es con ÉL».
Este lenguaje nos expresa la unidad e identidad que el creyente comparte con Cristo, pues estamos unidos e injertados a ÉL.
Ellos residían en 2 hogares a la vez:
- 1.- EN Cristo en cuanto a su posición espiritual, del cual obtienen sus bendiciones, con unas enormes implicaciones espirituales, y EN ÉL vivían en Lugares Celestiales.
- 2.- EN Éfeso en cuanto a su posición terrenal y física, definiendo su identidad personal.
Vivir EN CRISTO significa ser redefinido por ÉL, es decir, que ÉL configure todo nuestro ser, haciéndonos cada vez más como ÉL y menos como nosotros, en una unión íntima y estrecha; tanto, que Pablo sólo pudo describirla con esas dos palabras unidas como nosotros a ÉL: EN CRISTO.
La Redención es EN Cristo, la Justificación es EN Cristo, la Santificación progresiva es EN Cristo, la seguridad de la Salvación Eterna es EN Cristo,…
La única forma en que la CRUZ tiene una implicación real para nosotros, es si la unión nuestra con ÉL es tal, que su muerte es la nuestra, y su Resurrección la nuestra; y eso sólo lo conseguimos por la DOBLE IDENTIFICACIÓN:
- 1.- La de Cristo con Nosotros a través de la Encarnación (ver Gálatas 4:4, Juan 1:1 y 1:14), que ya es hecha a la perfección por ÉL.
- 2.- La de Nosotros con ÉL, que debe ser a través del arrepentimiento y, sobr todo, de la Fe (Marcos 1:15, Hechos 17:30-31)
GRACIA Y PAZ
El típico saludo paulino que aparece en las 13 cartas de Pablo.
«Charis» es Gracia en griego y era el típico saludo entre NO judíos (esto implica que en la iglesia había gentiles) , e implica Favor, pero NO a personas merecedoras, ni tampoco se trata de un favor inmerecido, sino que es más aún, es un favor desmerecido (ya que Dios lo hace a miserables enemigos e hijos de ira quienes sólo y únicamente merecen SU Ira).
La Gracia es el regalo inmerecido de Dios por medio de Jesucristo, a nuestro favor y para SU Gloria y Honra, para alabanza de la Gloria de su Gracia; es la maravillosa demostración del Amor de Dios por nosotros.
Colosenses 3:15 «Y la Paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos.»
«Shalom»es Paz en hebreo («eirene» en griego), una paz completa que denota bienestar, y era el típico saludo hebreo; es el sentimiento emocional y mental, es decir, el bienestar integral que experimenta el cristiano como resultado de su relación estable y restaurada con Dios.
¿POR QUÉ GRACIA ANTES QUE PAZ?
Porque primeramente y antes de nada debemos conocer SU Gracia para así poder experimentar SU Paz; es decir, NO tendremos SU paz hasta que no tengamos antes SU Gracia; pues la Paz que sobrepasa todo entendimiento es una condición que resulta de la Gracia.
La Paz es el resultado de la Gracia, la consecuencia de haberla experimentado.
La Gracia produce Paz, NO viceversa.
La Gracia es la Obra (la de Dios EN Cristo a nuestro favor), y la Paz es el resultado en nosotros.
Paz NO sólo es ausencia de conflicto, sino que además es la presencia de bendiciones positivas, y eso sólo bes posible EN Cristo.
EL es Príncipe de Paz (Isaías 9:6), ÉL es nuestra Paz (Efesios 2:14)
Esta paz completa que sobrepasa todo entendimiento y capacidad mental del ser humano, así como la Gracia que la causa SÓLO PROCEDE DE DIOS.
Juan 14:27 «La PAZ os dejo, MI PAZ os doy; yo NO os la doy como el mundo la da. NO se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo»