El Sanedrín ya ha decidido que es culpable, y que debe morir; ahora sólo falta que el instrumento ejecutor (ellos NO podían aplicar la Pena Capital) cumpla con sus malvados y terribles deseos. ÉL tuvo dos juicios; uno judío y religioso, y otro romano y secular. Nos centraremos en este último hoy, donde tendrá lugar Seguir leyendo
