En el personaje que hoy analizaremos vemos en él que es la primera figura creada del Salvador.
Se trata de la Primera Cabeza Federal y Representativa de la Humanidad.
En él hallamos similitudes y semejanzas, aunque son más pronunciadas y destacadas las diferencias y los contrastes entre ambos.
Efectivamente, te hablo del perimer hombre creado por Dios, ADÁN, cuyo nombre puede significar desde «hombre» a «rojizo» pasando por «hecho de tierra».
ADÁN, TIPO DE CRISTO
Y lo que hoy haremos, ya lo hizo el Apóstol Pablo por inspiración divina en el capítulo 5 de la carta a los Romanos.
Romanos 5:14 «No obstante, reinó la muerte desde Adán hasta Moisés, aun en los que no pecaron a la manera de la transgresión de Adán, el cual es figura (TIPO, SÍMBOLO, PREFIGURACIÓN O PRESAGIO) del que había de venir (del Adán Venidero, esto es, Cristo).»
¿POR QUÉ VEMOS A CRISTO EN ADÁN; EN TIPO Y EN CONTRASTE?
ADÁN era la Obra Maestra de Dios, la sublime creación, una creación llevada a cabo magistralmente por el 2º Adán, por Dios Hijo, formado conforma a la imagen y semejanza de ÉL (Génesis 1:26-27) y para ser compañero de Dios (Génesis 2:15)
Ver estudio Detalmanera sobre la Caída: https://detalmanera.com/la-caida/
ADÁN fue establecido rey del universo, creado directamente por Dios (ÉL era su Padre)ya que Dios le dio el poder de dominar sobre los peces del mar, las aves del cielo y sobre todo animal terrestre (Génesis 1:28-30).
CRISTO, nuestro Mejor y Verdadero Adán, quien siempre y por toda la Eternidad fue el compañero ideal de Dios, siendo igual a ÉL en sustancia, esencia, atributo y naturaleza (Juan 1:1-2), así como la imagen misma de ÉL, del Invisible (Juan 14:9, Colosenses 1:15), es el REY Absoluto y Soberano de la Creación, quien tiene Toda Autoridad, Dominio y potestad sobre ella (Mateo 28:18)
Adán era un hijo de Dios como así dice Lucas 3:38, mientras que Cristo es el Eterno Hijo de Dios, concretamente DIOS HIJO, la 2ª Persona de la Trina Deidad.
PERO todo se vino abajo…
Prácticamente toda la Tipología que hallamos entre Adán y Cristo en forma de semejanza se acaba en Génesis 3, y desde ahora sólo vemos contrastes y antítesis entre ambos.
¿Qué ocurre en Génesis 3?
De sobra es sabido por todos nosotros que en GÉNESIS 3 entra en escena el mal, la desobediencia, la iniquidad, la Rebelión, la Alta Tración, el Pecado y LA MUERTE (sea física, sea espiritual, y sea Eterna)
Con él vino la desgracia y la ruina moral y espiritual de toda la raza humana, ya que en él caímos y pecamos todos, en él nos convertimos en pecadores por naturaleza
Romanos 5:12 «Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre (Adán), y por el pecado la muerte (es la paga o el salario de haber pecado ante un Dios Justo y Santo), así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron (Todos pecamos en él, en ese momento, recibiendo también la paga o el salario del pecado, es decir, la Muerte)»
Miles de años después, aún un Rey que escribió los Salmos más bonitos de la Palabra de Dios, y que tenía un corazón conforme a Dios escribió lo siguiente:
Salmo 51:5 «He aquí, en maldad he sido formado, y en pecado me concibió mi madre.»
¿Es justo que por la caída de uno, todos paguemos sus terribles y trágicas consecuencias?
Antes de darte la Mejor Respuesta, te diré que Toda la Humanidad estaba potencialmente representada en Adán, y unida por solidaridad y responsabilidad a él, así que se nos fue transferido esa naturaleza caída y depravada, transformando nuestro interior y trayendo muerte espiritual (separación para con Dios)
Cuando ADÁN peca es separado de Dios y es arrojado del paraíso terrestre; mientras que JESÚS debe humillarse, descender de Su Paraíso celestial a consecuencia precisamente del pecado, del de todos nosotros.
Ahora CRISTO, el Postrero Adán irrumpe en la Tierra…
Y de la misma manera que la 1ª Cabeza federativa y representativa de la humanidad nos representó absolutamente a Todos, CRISTO podía también representarnos a Todos, ya que ÉL es la Cabeza de una Nueva Humanidad.
Créeme que este Plan Redentor es mucho más misericordioso por parte de Dios (a pesar de que se nos fue imputada la culpa y sentencia de Adán), que si tuviéramos que responder cada uno de forma individual, ya que hubiéramos hecho exactamente lo mismo que Adán, es decir, pecar, y más pecar ante DIOS.
Y ahora SU Vida Perfecta y Obediente a la Ley de Dios (por tanto a Dios mismo) puede sernos imputada y transferida de la misma manera que la desobediencia al mandato de Dios ( y por tanto a Dios mismo) nos fue hecho en Adán.
CRISTO se convirtió en nuestro nuevo Representante, un Mejor representante de la raza que vino desde el cielo (y NO de la Tierra como Adán), siendo Eterno (Adán sí que tuvo principio y comienzo) y NO creado (Adán sí que lo fue creado), para revertir lo que precisamente hizo Adán, y consecuente Todos nosotros en él.
Como dijo uno de los más prominentes Padres de la Iglesia, como es Agustín de Hipona: “¡Oh feliz culpa que nos mereció tener tan grande y excelente Redentor!”
Romanos 5:19 «Porque así como por la desobediencia de un hombre (Adán)los muchos(Toda la Huanidad) fueron constituidos pecadores (tanto por naturaleza como por Justicia, en base a la caída de él), así también por la obediencia de Uno (Cristo, el mejor y Verdadero Adán), los muchos (los creyentes unido e injertados a ÉL por la FE) serán constituidos justos ( en base a la Justicia de ÉL).»
2ª Corintios 5:21 «Al que NO conoció pecado (Cristo, el Postrero Adán), por nosotros (para nuestro beneficio y para SU Gloria) lo hizo pecado (tratándolo Dios como el culpable de todos los Pecados), para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en ÉL (otorgándonos SU Vida perfecta a nosotros) .»
Adán y Cristo, son TENTADOS…
Mientras uno lo tenía todo a su favor, y gozaba de todas las necesidades más que cubiertas y en abundancia en medio de un precioso jardín, Cristo está es un hostil desierto, padeciendo la escasez de sus necesidades vitales como es el alimento y el agua (el pan de Vida, y el agua viva de la vida pasando hambre y sed)
Y es allí mismo, en ese desierto donde nuestra nueva Cabeza representativa va a reclamar el trono que perdió el primer Adán, para de esta manera, poder darle al hombre el reinado que un día perdió
El Desenlace de la tragedia de Génesis 3 se halla en la Victoria de Lucas 4.
Jesús, el Postrero, el Mejor y Verdadero Adán, tenía que ganar la batalla por tí y por mí exactamente de la misma manera que la perdió Adán (y como consecuencia todos).
Lo que ADÁN perdió desobedeciendo al dudar, cuestionar y negar a la Palabra de Dios, el Postrer Adán, CRISTO JESÚS, siendo también pleno hombre (si dejar de ser pleno Dios), recuperó y venció; y lo hizo con la Palabra de Dios como estandarte; por ti y por mí, y para SU Gloria.
El mal trágico que teníamos en el primer hombre, en Adán, nos pone de relieve la sobreabundante Gracia del segundo hombre, de Jesús.
Mientras el Primer Adán se somete a satanás y es vencido (Génesis 3.6), el 2º Adán se somete entera y perfectamente a la Voluntad de Dios y vence al diablo (Lucas 4:13)
Y al igual que la condenación de Adán arrastró a la Humanidad entera, la VICTORIA APLASTANTE DE CRISTO ofrece Salvación y reconciliación igualmente a la Humanidad entera; siendo EL exaltado y glorificado.
Adán murió por su culpa, por sus propios pecados, y por su desobediencia, Cristo murió por nuestra culpa, por nuestros pecados y desobediencias.
Isaías 53:6 «Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en ÉL el pecado de todos nosotros.»
Adán representa a la vieja naturaleza, caída, depravada y condenada y sentenciada a muerte; mientras que Cristo representa a la Naturaleza Nueva, redimida y Justificada EN ÉL, que nos reconcilia y acerca para con Dios, otorgándonos la Vida Eterna.
1ª Corintios 15:22 «Porque así como en Adán todos mueren (yacemos bajo condenación), también EN Cristo todos serán vivificados (estando unidos EN ÉL)”.
Sólo mediante el ARREPENTIMIENTO de nuestra anterior vida sin dios, alejado de ÉL, y mediante la FE en la Persona y Obra de Jesús es que podemos ser SALVOS, y pasar de estar en Adán (Condenación a muerte eterna) a estar EN Cristo (justificados y poseedores de la Vida Eterna)
Cristo murió por ti, para revertir tu condenación y tu culpa; una condenación y una culpa que aunque por ti mismo la merezcas, ya te venía desde Adán; y ahora Dios ofrece Perdón y Restauración en base a que Uno (¡y que grande ese Uno!) vino en semejanza tuya, tomó tu culpa, se sentó en el tribunal de Dios y le dijo al Padre: «su condena por todo lo mal que ha hecho, recaiga enteramente sobre mí»
CRISTO EN NOSOTROS, ESPERANZA DE GLORIA
Romanos 11::36 « Porque de ÉL, y por ÉL, y para ÉL, son todas las cosas. A ÉL sea la Gloria por los siglos. Amén.»