Una vez que Pablo ha expuesto el Plan Eterno de los Siglos (desde una óptica y una visión trinitaria, que abarcan desde la Eternidad pasada a la Eternidad futura; y después de orar Pablo por los efesios (y por todos los receptores de la carta, esto es, por nosotros) pidiendo al Espíritu Santo de Dios que nos dé revelación e iluminación para comprender Quién es ÉL, la herencia y el llamado en ÉL, y sobre todo el sublime Poder de ÉL que operó y está dispuesto para nosotros; AHORA PABLO VA A TRATAR Y A EXPONER LA SALVACIÓN RECIBIDA POR GRACIA.
Se trata de una porción muy importante en cuanto a la teología soteriológica de Pablo, con una de las descripciones más claras de nuestra salvación en Cristo.
Pablo va a decirnos cómo éramos ANTES por naturaleza, y cómo somos AHORA por Gracia.
Entre nuestro pecaminoso pasado, y nuestro glorioso presente (y futuro) ha ocurrido algo, ha pasado algo, y eso es lo que Pablo va a tratar de exponer.
Si el capítulo 1 finalizó con una petición del Poder de Dios, un Poder que actuó resucitando y exaltando a Cristo (Ver estudio: https://detalmanera.com/vi-la-1a-oracion-intercesora-de-pablo-por-nosotros-efesios-115-23/,) ahora inicia este 2º capítulo hablando de cómo ese mismo Poder de Dios actúa en nosotros y nos da vida, nos resucitó espiritualmente, y nos exaltó a lugares celestiales EN Cristo.
Para hablar de tal operación de Dios en el creyente, va a empezar dando el DIAGNÓSTICO BÍBLICO DEL SER HUMANO, que NO es otro que la MUERTE ESPIRITUAL; término con el que se describe la separación y alienación de Dios.
Mientras que físicamente estamos vivos, y la vida procede y emana de Dios, al estar separados de ÉL, estamos espiritualmente muertos
Si la Vida Plena y Verdadera es la comunión con Dios, las transgresiones, delitos y pecados nos aleja de dicha vida procedente de Dios.
Una vida sin Dios es sinónimo de una muerte, aunque se esté orgánica y físicamente vivo, similar a un «zombie»
¿Cómo salimos y escapamos de esta situación de bancarrota y muerte espiritual?
CON EL PODER DE DIOS
El Poder, la capacidad y la fuerza humana es ineficaz para ello, pero el Poder de Dios, que resucitó a Cristo (así acabó Pablo el anterior capítulo), puede resucitarnos, liberarnos de la esclavitud de la maldad, del pecado y sus consecuencias
Romanos 1:16 «Porque NO me avergüenzo del Evangelio, porque es PODER DE DIOS para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.
En definitiva, Cristo estaba muerto y Dios (el Dios Trino) lo resucitó, lo levantó y exaltó; asimismo nosotros estábamos muertos y ÉL nos dio vida, nos resucitó, nos levantó y exaltó con Cristo y EN Cristo.
EFESIOS 2:1-10 «Y ÉL (Cristo) os dio vida (a través de Su Espíritu Santo, el Vivificador nos insufla e imparte Su vida) a vosotros, cuando estabais muertos (Depravación total tras la caída y el pecado original que nos separa, aleja, enemista e incomunica con Dios) en (alude a la esfera y el dominio de los NO Regenerados) vuestros delitos («Paraptoma», que alude actos voluntarios equivocados, una caída) y pecados («amartia», que alude a errar en el blanco, pensando en los tiradores de flechas; es decir, NO alcanzar la meta deseada. Escoger nuestro camino apartado y alejado de Dios), en los cuales anduvisteis (en un tiempo pasado antes de la conversión) en otro tiempo (Ahora Pablo va a decirnos nuestros 3 enemigos; 2 externos y uno interno), siguiendo la corriente (conforme a los poderes de este mundo, siguiendo el curso de éste) de este mundo (sistema y valores de esta sociedad y este mundo que rechaza, resiste y se opone tajantemente a Dios, a Su Palabra, y todo cuanto tenga que ver con ÉL), conforme al príncipe de la potestad del aire (Satanás; Juan 12:31, 14:30, 16:11, 2ª Corintios 4:4), el espíritu (influencia o fuerza impersonal satánica del mal que mantiene a los no regenerados cautivos y esclavizados y en rebeldía hacia Dios) que ahora opera (energiza. Él influye para que reine la maldad en el mundo; crimen, guerras, corrupción moral, destrucción y desintegración de la familia,…) en los hijos de desobediencia (los rebeldes para con Dios, con una oposición activa y deliberada), entre los cuales también todos nosotros (Pablo se incluye en este grupo, pues antes de su encuentro con Jesús en Hechos 9 era un pecador, perseguidor de la Iglesia, de Cristo mismo. Es una realidad y un problema Universal) vivimos en otro tiempo (impulsados por nuestros pecaminosos deseos) en los deseos de nuestra carne (nuestra naturaleza humana, caída, depravada y egocéntrica que nos lleva a unos deseos corrompidos) , haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos (Todos los hombres parten siendo caídos frente al creador y Juez) por naturaleza (NO somos pecadores porque pecamos, sino que pecamos porque somos pecadores) hijos de ira (objeto de la Ira y la Furia de Dios, ver Romanos 1:18-21. NO sólo estábamos espiritualmente muertos, sino que estábamos condenados. SU Amor y SU Ira son 2 caras de la misma moneda, Ver Juan 3:16 y 3:36. La Ira de Dios es la reacción a Su Justicia y Santidad), lo mismo que los demás (Todos, es decir, judíos y gentiles. ver Romanos 5:12). PERO DIOS (con sólo estás 2 palabras revierte toda la depravidad y nuestra pecaminosa situación, y vemos qué pasa de describir Su Justa Ira, a describir Su Glorioso Amor), que es rico en Misericordia (Su Misericordia se percibe al perdonar a pecadores que merecían Su Juicio y Su Ira, un juicio y una irá desplegada enteramente sobre Su Hijo), por SU Gran Amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos (necesitamos ser vivificados) en pecados, nos (los 3 «nos» de los versículos 5 y 6 señalan nuestra unión e identificación con Cristo en Su Resurrección, Su Ascensión y Su Exaltación a la Diestra de Dios) dio vida (NO necesitamos un guía espiritual o un maestro, sino que necesitamos a Aquel quien es la Vida y puede darnos vida espiritual, resucitarnos espiritualmente) juntamente con (EN ÉL) Cristo (por gracia (NO fue por algún mérito nuestro que ÉL vio en nosotros, sino porque estaba en ÉL) sois salvos), y juntamente con ÉL nos resucitó, y asimismo (unidos, arraigados e injertados EN ÉL por medio de la fe compartimos Su Obra de Resurrección, Ascensión y Exaltación) nos hizo sentar (resultados directos e inmediatos de la salvación) en los lugares celestiales (es el dominio sobrenatural donde Dios reina, pero que momentáneamente Satanás opera y tiene influencia según Efesios 3:10 y 6:12) con Cristo Jesús (Participamos de Su Gloria en la exaltación en Cristo), para (motivo o propósito de Su Obra en nosotros) mostrar en los siglos (tiempos) venideros las abundantes riquezas de Su Gracia en SU Bondad para con nosotros en Cristo Jesús. Porque por Gracia (inmerecida bondad por la que Dios nos salva) sois salvos por medio de la FE (medio o canal por el cual se recibe la Salvación, siendo la persona y obra de Cristo el objeto de dicha fe para alcanzarla, como si fuera la mano de un pobre que recibe, sin mérito alguno, lo que se le ofrece); y esto NO de vosotros (alude a la Salvación, la cual es de Dios, ya que todo el contexto del capítulo es acerca de ella y NO de la fe), pues es don (regalo de Dios) de Dios; NO por obras (aún nuestras mejores obras son como un trapo sucio ante ÉL, sólo EN Cristo es que somos justificados y dignos ante ÉL), para que nadie se gloríe (nadie se jacte en sí mismo, sino que si se jacta, sea de la Cruz). Porque somos hechura (en el original está palabra significa Poiema, de Poema, que alude a un producto manufacturado por un artesano) creados EN Cristo Jesús (Nueva Creación, ver 2ª Corintios 5:17) para buenas obras (una vida con propósito donde Dios es glorificado es Servir), las cuales Dios preparó (dispuso) de antemano para que anduviésemos en ellas (a fin de que las pongamos en práctica, pues las obras NO salvan, pero evidencian y demuestran una salvación y una fe genuinas. Ver Santiago 2:14-26, Filipenses 2:12-13, 2ª Timoteo 3:17, Tito 2:14 ).»
Al leer estos versículos, lo primero que nos viene a la cabeza son los marcados contrastes que hallamos en estos; es decir, vemos al «antes» y el «ahora», la vida de pecado antes de Cristo, y la vida de fe en ÉL, vivir en delitos y pecados a vivir realizando buenas obras preparadas y dispuestas ya por Dios, la muerte en contraposición a la vida, la influencia de esta sociedad que rechaza a Dios con respecto las regiones celestiales, nuestra carne (es decir, la naturaleza caída y pecaminosa), con nuestra unión con Cristo, la ira frente a la misericordia y la Gracia de Dios, las obras a la fe, estar bajo el que gobierna la potestad del aire frente a estar sentados con Cristo.
Para analizar y exponer estos versículos, vamos a tratar (a modo de contraste) ver al Antes y el Después, para finalizar viendo el Cómo.
I.- NUESTRO DIAGNÓSTICO (ANTES)
En los 3 primeros versículos de este 2º capítulo de Efesios se nos expone la nefasta, deprava, dramática y triste realidad y condición de la humanidad en su estado natural, donde se caracteriza por una vida sin propósito alguno
Pablo dice que estábamos MUERTOS EN DELITOS Y PECADOS, aludiendo NO a una muerte física, sino a una separación y alienación con Dios.
Éramos hijos de Adán, y carecíamos de las facultades espirituales que nos permitiesen apreciar las grandes verdades espirituales, con un entendimiento entenebrecido y «ofuscado» y extraños totalmente a la vida de Dios.
A modo de resumen, el hombre fue creado por Dios, conforme a SU Imagen y Semejanza (Génesis 1:26-27), en cuanto a moralidad, carácter y personalidad; manteniendo una íntima y estrecha relación de obediencia con Dios nuestro Creador, donde ÉL es glorificado.
Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.» (Génesis 2:16-17) La frase «ciertamente morirás» puede ser traducido literalmente «muriendo morirás.» Esto significa un estado continuo de muerte que comenzó con la muerte espiritual, continúa a lo largo de la vida como una degradación gradual del cuerpo y culmina con la muerte física. La muerte espiritual inmediata dio lugar a la separación de Adán de Dios. Su acto de esconderse de Dios (Génesis 3:8) demuestra esta separación, como lo hace su intento de echarle la culpa por el pecado a la mujer (Génesis 3:12).
En otras palabras, podíamos conocer, amar y servir a Dios, PERO tras la caída en pecado se distorsionó y se empañó esa imagen y esa semejanza, se rompió y se destruyó esa relación y el hombre pasó a ser enemigo de Dios, aborrecedor de él (Romanos 1:30), y enemigos de ÉL en nuestras mentes (Colosenses 1:21).
Se perdió la inocencia original y la integridad moral, dejándonos incapaz de buscar por nosotros mismos a Dios, y consecuentemente, incapaz de salvarnos y sin esperanza alguna, salvo que Dios actuara (¡Y LO HIZO!)
Pero NO quiere decir en absoluto que estos «muertos espiritualmente» hayan perdido toda responsabilidad moral, ni que sean incapaces de responder de manera afirmativa al llamamiento del Evangelio, siempre con la ayuda y la gracia del Espíritu Santo (de hecho para creer ésto, deberíamos eliminar cientos de textos y versículos de la Biblia)
Véase sólo algunos de ellos: Efesios 1.13, Romanos 10:13-15, Juan 1:12, Juan 3:36, Juan 20:31, Mateo 23:37, Ezequiel 33:14-15, Isaías 1:19-20, Joel 2:12-13, Marcos 10:52 , Juan 11:45, Hechos 2:37-38, Hechos 3:19, Hechos 9:35, 2ª Corintios 5:20, Santiago 4:8, 1º Juan 5:10, Apocalipsis 9.20-21, …
Romanos 5:12 » Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.»
En definitiva, Todos hemos pecado contra Dios, contra el Santo, contra el Señor de la Gloria.
¿Qué diagnóstico bíblico nos da la Palabra de Dios?
Eclesiastés 7:20 «Ciertamente NO hay hombre justo en la tierra, que haga el bien y nunca peque.»
1ª Reyes 8:46a «Si pecaren contra ti (porque NO hay hombre que no peque) …»
Romanos 3:9-11 «¿Qué, pues? ¿Somos nosotros mejores que ellos? En ninguna manera; pues ya hemos acusado a judíos y a gentiles, que todos están bajo pecado.Como está escrito: NO hay justo, ni aun uno; NO hay quien entienda, NO hay quien busque a Dios.»
Romanos 3:23 «Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios»
Tito 3:3 «Porque nosotros también éramos en otro tiempo insensatos, rebeldes, extraviados, esclavos de concupiscencias y deleites diversos, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles, y aborreciéndonos unos a otros»
Además de darnos el diagnóstico, Efesios 2:1-3 nos explica que en nuestro estado natural y caído operan 3 fuerzas o influencias, 2 externas (este mundo y el que opera en él) y una interna (nuestra naturaleza depravada, caída y pecaminosa), las cuales nos mantienen en esclavitud .
1.- MUNDO (la corriente y sistema de este mundo); donde alude a la sociedad, la cultura, el modelo o estilo de vida secular que NO viven de acuerdo a Dios ni en el temor de Dios, sino que vive alejado y de espaldas a ÉL, sin tenerlo en cuenta. Satánicamente organizado, donde se evidencia la oposición, el rechazo y el odio hacia Dios y hacia los hijos de Dios, tratando de mantener a la gente en una esclavitud, y alejados de Dios y de SU Propósito; de ahí que Gálatas 1:4 diga que los cristianos son rescatados de este mundo malvado, o que Romanos 12:2 diga que NO nos amoldemos ni adaptemos a este mundo, a este patrón y sistema.
2.- SATANÁS (Príncipe de la potestad del aire), quien tiene el mando de los poderes y autoridades que operan e influyen en el mundo invisible y encabeza la continua rebelión y rechazo a Dios. Él opera e influye de manera activa en las personas NO regeneradas, alejándolos de Dios en una vida continua de rechazo y separación de ÉL (como si no existiera a veces) Cristo ha sido exaltado sobre todos los poderes y llena todas las cosas (1:21-23), sin embargo existe también otro poder operativo y energizante, como es el maligno o diablo, el acusador.
Tenemos que decir (y más viendo el contexto de la Iglesia hoy día) que por parte nuestra, se le ha dado más importancia, énfasis (creo que una excesiva importancia) y valor al diablo que lo que la misma Biblia da, y tratamos de achacar cualquier cosa a él en vez de a nuestra maldad, a nuestra condición.
El diablo NO es omnipresente, y NO hay 2 fuerzas cósmicas espirituales en igualdad de condiciones luchando y disputándose la humanidad, ¡NO!. Sólo hay un Único Ser Supremo, y este es Dios y ÉL ya ha vencido y triunfando EN Cristo.
A nosotros se nos manda resistir con la armadura espiritual, y él huirá
O vivimos en pecado y bajo su influencia esclavizante o vivimos en Cristo y bajo Su Señorío; o servimos al pecado o servimos a Cristo, o estamos muertos espiritualmente o estamos vivos, o somos hijos de ira o somos reconciliados y amados hijos de Dios en ÉL, PERO NO hay término medio.
3.- CARNE (nuestra naturaleza humana, caída, depravada y egocéntrica). Todos, por solidaridad y por ser Adán la cabeza federal y representativa de la humanidad, poseemos la naturaleza caída que tuvo él; y es por eso que ya desde bebés vemos que lloran, y los niños aun desde tempranas edades mienten,… El día que Adán desobedeció, murió espiritualmente (aunque físicamente vivió unos 900 años más) y se separó de Dios.
SÓLO HAY UN PODER DE CONVICCIÓN PARA TAL PERVERTIDA CONCIENCIA
¿CUÁL?
EL ESPÍRITU SANTO A TRAVÉS DE LA PREDICACIÓN DEL MENSAJE, DEL EVANGELIO.(Ver https://detalmanera.com/plan-salvacion-evangelio/)
Juan 16:8-11 «Y cuando ÉL (Espíritu Santo, el Consolador) venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio. De pecado, por cuanto no creen en mí; de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más; y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.»
NO sólo estábamos espiritualmente muertos, sino que además TODOS estábamos bajo la Ira de Dios, es decir bajo condenación.
Hablar de SU Ira NO es sinónimo de malicia, despecho o venganza, sino que es la reacción de SU santidad y SU Justicia, es decir,su hostilidad personal, justa y constante hacia todo vestigio de mal, así como Su negación absoluta, Su propósito de condenarlo y juzgarlo ya que ÉL es 3 veces Santo.
Juan 3:36 « El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.»
Aunque TODOS estamos (o estábamos bajo condenación), Dios NO va a quedar fuera de la ecuación, ni Su Ira se va a exaltar por encima de SU Misericordia; y es por eso, que en las siguientes 2 palabras, del Siguiente versículo (Efesios 2:4) vemos el tremendo contraste entre Su Ira y Su inmenso Amor, un Amor que le lleva a entregarse sin miramiento alguno
II.- PERO DIOS…
Dios actúa con Misericordia, NO porque haya algo nuestro que le motive, sino porque ÉL es Amor, y es algo inherente e intrínseco en ÉL darse y entregarse para proveernos salvación.
ÉL ENCONTRÓ UN MOTIVO EN SÍ MISMO, NO EN NOSOTROS.
POR SU MISERICORDIA, POR SU GRACIA, POR SU AMOR TAN GRANDE, POR SU COMPASIÓN,…
El ser humano estaba en un estado permanente de fracaso total, incapaz por sí mismo de salvarse, y Dios intervino para cambiar y revertir nuestra condición.
¿QUÉ HIZO DIOS?
1.- Nos dio e impartió Vida con Cristo, por Su Espíritu (ver Romanos 8:2), estando nosotros espiritualmente (no físicamente) muertos
2.- Nos resucitó en unión y adhesión a ÉL (mediante la fe)
3.-Nos hizo sentar en los lugares celestiales
Es decir, lo mismo que Dios hizo en Jesús, asimismo lo realizó en nosotros: Nos revivió, nos levantó y nos sentó, siempre EN ÉL, ya que unidos a ÉL compartimos SU obra en cuanto a la Resurrección, la Ascensión y la Sesión.
Desde estos versículos en adelante, aparecen palabras (muy e contraste con las que aparecían en los versículos anteriores) como son: Misericordia, Amor, Gracia, Bondad, Don, Buenas Obras,…
TODO HA CAMBIADO, DIOS HA INTERVENIDO.
Gálatas 4:4-5 «Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley,para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos.»
Aparte de SU Misericordia, NO hay ni un ápice de esperanza para la humanidad; y lo más glorioso y lo más fascinante de todo es que Dios NO se quedó pasivo ante tal cruda y nefasta realidad de la humanidad, sino que es y fue el protagonista quien apaciguó SU Ira, y mostró Misericordia.
Juan 3:16 « Porque de tal manera amó (SU AMOR) Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito (SU GRACIA), para que todo aquel que en él cree, no se pierda (SU PROPÓSITO), mas tenga vida eterna (SU GLORIA).»
Este maravilloso contaste nos resuena ya desde el Antiguo Testamento, donde hallamos exactamente las mismas palabras de mano del salmista, unas palabras cargadas de esperanza y consuelo.
Salmos 49:12-15 «Mas el hombre no permanecerá en honra; es semejante a las bestias que perecen.Este su camino es locura; con todo, sus descendientes se complacen en el dicho de ellos. Como a rebaños que son conducidos al Seol, la muerte los pastoreará, y los rectos se enseñorearán de ellos por la mañana; se consumirá su buen parecer, y el Seol será su morada. PERO DIOS redimirá mi vida del poder del Seol, porque ÉL me tomará consigo. Selah»
Colosenses 1:12-14 «Con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz;el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo,en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.»
La Biblia nos dice claramente que HAY 2 REINOS Y 2 DOMINIOS, y cada uno con un rey que gobierna, y unos súbditos que obedecen y están sujetos a este rey.
Todos (tras Adán) nacemos en un reino oscuro, de maldad y cuyo rey es el príncipe de las tinieblas, el mentiroso, al adversario y el tentador, en definitiva, el «dios» de este siglo; y este reino se caracteriza porque cada uno vive como quiere, haciendo lo que «le da gana», en clara insumisión y en constante rebeldía.
¿CÓMO SALIR DE UN REINO Y ENTRAR EN OTRO?
Te pondré una fácil ilustración; nadie nacido en España y con DNI español puede dejar (de un día para otro) de ser ciudadano español, ni decide No pagar impuestos y vivir ajeno a este reino (en este caso España), ya que está bajo la potestad y autoridad de la nación, PERO llegará un día cuando sí que dejará de ser ciudadano español con sus derechos y obligaciones.
¿CUÁNDO?
EL DÍA QUE MUERA
Así es exactamente igual con el Reino de las Tinieblas, DEBEMOS MORIR, porque ese reino NO es tan físico sino que es algo inherente e intrínseco en nosotros, mismos, y por la FE en Cristo, y en unión orgánica a ÉL es que NO sólo morimos con Él, sino que además entramos en SU REINO.
¿CÓMO ENTRAR A SU REINO DE LUZ?
De la misma manera que yo por nacer en España soy ciudadano español, en este Reino, mediante el arrepentimiento y la FE en ÉL es que NACEMOS DE NUEVO, y es hora que podemos entrar en SU Reino, y estar bajo este Rey, el Rey de Reyes.
III.- NUESTRO REMEDIO (DESPUÉS)
Tal vez estos versículos (Efesios 2:5-10) sean de los más profundos e importantes de la soteriología paulina, y comienza como comenzó el capítulo en el versículo 1, es decir, repitiendo la afirmación de que estamos muertos en pecados; para a continuación, decirnos las siguientes verdades espirituales que vamos a exponer:
1.- NOS DIO VIDA CON CRISTO, NOS RESUCITÓ Y NOS HIZO SENTAR EN LUGARES CELESTIALES, alude a que realmente nos dio vida espiritual, siendo una resurrección NO física, sino más bien espiritual; ya que el ser humano necesita urgentemente que se le imparta vida, y es el Espíritu Santo quien la infunde a los espiritualmente muertos
Pablo NO separa la muerte de Cristo de Su Resurrección, así como en nuestro caso, los cristianos que estamos unidos, arraigados e injertados EN Él, tomamos parte de ambos (Muerte y Resurrección, ya que sin ésta, NO hay salvación, pues la salvación depende de ambos acontecimientos)
NO alude a una resurrección futura (la cual se llevará a cabo en la glorificación del cuerpo), sino que más bien trata un hecho en el pasado, pero con consecuencias constantes en el presente
Juan 6:63 «El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.»
Ver además: Romanos 5:5, 8.9-17, 1ª Corintios 6:11, 2ª Corintios 3:6, Gálatas 3:2-6,…
¿HABLA PABLO REALMENTE DE MORIR CON CRISTO?
NO, de hecho ya estábamos muertos (ver 2:1 y 2:5). Él se refiere a que con SU Muerte, paradójicamente nos dio vida, ya que pagó la deuda con Dios e hizo morir toda enemistad con ÉL y con nosotros mismos.
Pablo habla de que cuando Dios resucitó a Cristo de entre los muertos y le exaltó, también resucitó y exaltó con ÉL y EN Él, a los cristianos, que por la fe están unidos en ÉL, de la manera que tal unión nos lleva a estar donde ÉL está, es decir, exaltados en las esferas de las realidades espirituales.
Colosenses 3:1-3 «Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, NO en las de la tierra.Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.»
Más versículos que hablan de nuestra plena identificación con ÉL: Romanos 6:1-14, 7:4, Filipenses 3:9-10, Colosenses 2:12-13 y 2ª Timoteo 2:11-13
Hechos 17:28 «Porque EN ÉL vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho: Porque linaje Suyo somos.»
TODO ESTO ESTÁ CONDICIONADO Y SUPEDITADO A ESTAR Y PERSEVERAR «EN CRISTO»
Como conclusión, decir que la Muerte y Resurrección de Cristo NO son simples acontecimientos aislados y pasados de los cuales obtenemos beneficios, sino que son realidades de las cuales los creyentes EN ÉL participamos.
ÉL ya se identificó con nosotros, con una caída humanidad que sólo merecía Ira, y lo hizo mediante la Encarnación (Juan 1:1, 1:18 y Gálatas 4:4), y ahora nos anda a nosotros que nos identifiquemos con ÉL a través de una fe viva y genuina.
2.- TODO POR GRACIA, y esta palabra tan importante en nuestra vida cristiana alude al amoroso y totalmente inmerecido (de hecho merecíamos justo lo opuesto, Su Ira) compromiso de Dios para con nosotros.
Eso es lo más maravilloso, que merecíamos ira y condenación y recibimos, sin dar absolutamente nada, gracia y salvación.
Fue enteramente voluntad e iniciativa de Dios, toda la iniciativa fue de ÉL, cualquiera que sea la intervención humana, hubiera sido inútil e ineficaz para sacarnos de la bancarrota de donde estábamos.
¿CUÁL ES EL PROPÓSITO?
Efesios 2:7 dice que es para demostrar en los tiempos venideros las riquezas de Su Gracia, es decir y en otras palabras, para que ÉL sea glorificado, es decir, para exhibir públicamente a todo el Universo, a personas, a ángeles, a todos los entes y poderes Su Amor y Su Misericordia, sin límite alguno (nos dio todo, es decir, a SU Hijo), sin igual, sin comparación e inconmensurables.
Si al levantar y exaltar a cristo, vinos que demostró SU Poder (ver Efesios 1:19-20), al levantarnos y exaltarnos a nosotros EN ÉL y con ÉL, demuestra y evidencia SU Inmensa Gracia.
Nosotros, los creyentes somos «Trofeos de la Gracia de Dios», y ÉL los exhibe en este caído y oscuro mundo.
La Iglesia redimida es la evidencia y la muestra de la gloriosa Gracia de Dios
Romanos 3:25-26 «A quien Dios puso (Cristo) como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados, con la mira de manifestar en este tiempo su justicia, a fin de que él sea el justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús.»
Las personas regeneradas, que han pasado de muerte a vida, de esclavitud a libertad y de satanás a Cristo sn la gran evidencia de Su Amor, Su Misericordia, Su Bondad y Su Gracia.
3.- EL PAPEL DE LA FE, hasta 4 veces se repite ese versículo (¡por algo será el versículo más repetido de la Biblia!), ya sea en AT, Habacuc 2:4 o en NT, Romanos 1.17, Gálatas 3:11 o Hebreos 10:38…
«EL JUSTO POR LA FE VIVIRÁ»
Hay que dejar bien claro que somos salvos por la Gracia de Dios, y NO por la fe; pero esta fe es el único medio por el que se recibe esta gracia, este regalo, es decir, la salvación se produce como un don de la Gracia inmerecida de Dios y se obtiene por la respuesta humana de la fe (la humilde confianza con la cual recibimos la Gracia)
Esta FE nos hace confiar en las promesas dadas de Dios, vivir a la luz de ellas, pero hay algo más, mucho más que un mero asentimiento intelectual o racional…
La fe genuina tiene una serie de implicaciones tales como: creer y confiar firmemente en ÉL, en su Persona y Obra, así como un arrepentimiento que nos lleva a apartarnos del pecado y de nuestra anterior y vieja vida, así como una posterior obediencia a SU palabra y una devoción y gratitud hacia ÉL.
LA FE NOS UNE A CRISTO DE TAL MANERA, QUE ESTAMOS ADHERIDOS A ÉL
Es como (por la FE), si SU Pasado fuese el nuestro, así como nuestra unión vinculante con ÉL, determina nuestro presente y nuestro futuro.
En líneas generales, y por consiguiente, afirmamos que la salvación NO es tanto creer en algo, o tomar una decisión, sino que es el resultado de estar EN Cristo, unido a ÉL y EN ÉL.
¿CUÁL ES EL «DON DE DIOS QUE NO PROCEDE DE NOSOTROS» DE EFESIOS 2:8?
Aunque hay base bíblica para aludir a la fe como un Don de Dios (Hechos 3.16, 14:24 y 18:27), así como una respuesta humana al mensaje oído del Evangelio, con el auxilio de la Gracia del Espíritu Santo; tanto por el contexto, así como el uso de las palabras «esto» (neutro) y «fe» (femenino), nos lleva a la conclusión de que se refiere a todo el proceso de la salvación por Gracia descrita en estos versículos.
PABLO NOS QUIERE DECIR QUE LA SALVACIÓN ES UN DON DE DIOS
4.- ¿OBRAS U OBRAS? Esta pregunta tiene un intencionado y marcado contraste que e puede ver en los siguientes versículos:
Efesios 2:9-10 « NO por obras, para que nadie se gloríe. Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.»
Nadie, repito, Nadie, puede ser salvo por sus «buenas» obras, ni por sus meritorios esfuerzos, sino sólo por la GRACIA DE DIOS.
NO existe ninguna condición o mínimo mérito humano por el que podamos conseguir (en nosotros mismos) aceptación, posición o privilegio ante Dios, es decir, en nosotros y por nosotros mismo NO tenemos derecha ante Dios, y sólo merecemos ira y condenación (aún por nuestras mejores obras)
Sólo hay una JACTANCIA PARA NOSOTROS, y NO está precisamente en Nosotros, sino en Cristo, en la Cruz.
1ª Corintios 1:30-31 «Mas por ÉL estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención; para que, como está escrito: El que se gloría, gloríese en el Señor.»
Pablo estaba muy preocupado por eliminar cualquier mínima base o sustento de jactancia humana, y que sólo Dios recibiera toda la alabanza, el honor y la Gloria.
TODA LA HUMANIDAD DEBE QUEDAR SILENCIADA Y CON LA BOCA CERRADA
Romanos 3:19 «Pero sabemos que todo lo que la ley dice, lo dice a los que están bajo la ley, para que toda boca se cierre y todo el mundo quede bajo el juicio de Dios»
Jeremías 9:24 NVI «Si alguien ha de gloriarse, que se gloríe de conocerme y de comprender que yo soy el Señor, que actúo en la tierra con amor, con derecho y justicia, pues es lo que a mí me agrada, afirma el Señor»
TODO LO QUE SOMOS Y TODO LO QUE HACEMOS ES UN DON DE DIOS
Pero al igual que Santiago, Pablo va a tratar de hablar (positivamente) del papel de las obras en un cristiano ya regenerado.
Si la Fe es como la raíz de un árbo, las buenas obras EN ÉL son los frutos de dicho árbol
Decir que santiago está hablando exactamente de lo mismo que Pablo, pero tal vez contrarrestando un desmesurado énfasis que se dio (donde no se evidencia exteriormente una fe que decían ser genuina e interior), y trata de explicar el otro lado de la misma moneda, es decir, que somos justificados solamente por la fe, pero esa fe genuina hará obras, y será evidencia y prueba de que hemos sido justificados
Santiago 2:17-18 «Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma. Pero alguno dirá: Tú tienes fe, y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras.».
2ª Timoteo 3:16-17 «Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.»
Las Buenas obras (solamente son buenas si estamos EN Cristo) son indispensables para la salvación, NO como su fundamento o medio, sino como su consecuencia y evidencia.
NO ES POR OBRAS QUE UNO SE SALVA, SINO PARA HACER BUENAS OBRAS ES QUE UNO ES SALVO
DIOS NOS HA CREADO PARA BUENAS OBRAS, LAS CUALES YA DISPUSO
SOMOS CREADOS EN ÉL PARA HACER SU VOLUNTAD
Decir que somos «hechura suya» es lo mismo que decir que somos como un poema, como una obra de arte artesanal que expresa la sabiduría y el diseño del autor; en definitiva, somos el fruto de SU Actividad (y como todo, siempre es EN CRISTO)
Maravilloso y tremendo el contraste, ya que ANTES, andábamos en «delitos y pecados» atrapados y esclavizados por satanás haciendo las obras de la carne, y AHORA, andamos en Buenas Obras, tratando se cumplir con SU Voluntad,
GRAN GRAN CAMBIO ENTRE 2 ESTILOS DE VIDA: MALO Y BUENO, Y ENTRE 2 AMOS: SATANÁS Y DIOS.
¿QUÉ ORIGINÓ Y PROPICIÓ ESE GRAN CAMBIO Y CONTRASTE?
DIOS Y SU GRACIA
LOS CIELOS, LA TIERRA Y EL HOMBRE NO SON SU GRAN OBRA MAESTRA, SINO QUE ES LA IGLESIA, EL CUERPO DE CRISTO, AQUEL QUE TODO LO LLENA EN TODO
Claramente se ha tratado de exponer la gran diferencia entre una vida sin Dios, y una vida que está con Dios EN Cristo, y los privilegios que supone ésto.
La Misericordia de Dios ofrece perdón y reconciliación hoy a TODOS, rogando e instando a todos y cada uno que se arrepienta de su vida anterior, caracterizada por el pecado, por andar espiritualmente muerto satisfaciendo los deseos de la naturaleza pecaminosa, y se vuelva en fe a Cristo para recibir la Vida espiritual que necesita, y EN ÉL, por la acción continua del Espíritu Santo es que se podrá vivir en obediencia y en «buenas obras» que le glorifiquen.
La gran diferencia entre el Evangelio de Cristo y las demás religiones es que en el Evangelio NO se trata meramente de conceptos, ideas ni doctrinas, sino que se trata de una plena identificación y comunión con Cristo (por el Espíritu Santo), ya que hemos sido crucificados con ÉL, bautizados en SU muerte, resucitados, ascendidos y exaltados con ÉL, habiendo despojado nuestro antiguo ser y revestido de Cristo.